martes, 7 de julio de 2009

Albaricoques a tutiplén


¿Qué hacer si la vida te depara 10 kilos de ricos albaricoques ecológicos? Con ecológicos quiero decir que el único aditivo que llevan es alguna caquita de pájaro que les haya caído a los pobres o algún rastro de insecto... vamos, que tienen suerte si les ha mirado alguien al pasar o han recibido algo de agua en toda la primavera. ¡Viva la naturaleza salvaje! Que se las apañen como puedan los albaricoques, hombre, que ya tienen edad.


Así que me tuve que poner a cavilar en qué podía emplear este alijo de albaricoques, gentileza de mi hermana, y que no fuera hacer 10 tartas para consumo inmediato. Pues hala, tocaba ponerse a procesar albaricoques como una posesa, además con la cocina a más de 28 ºC... se me ha quedado un cutis limpísimo con todas las toxinas que he sudado. No hay mal que por bien no venga. Como tengo poca imaginación:

Mermelada...


Sorbete de albaricoque...


Crema de albaricoque tipo curd inglés...


Y el resto al congelador, partiditos por la mitad y deshuesados. Encontré también una receta de licor de albaricoque, pero usaba aguardiente de orujo, que no me gusta nada de nada.

Receta chapucera de mermelada

Se llena una cazuela esmaltada de albaricoques partidos y deshuesados. Se echa azúcar, o fructosa en mi caso, completamente a ojo. Se pone a calentar hasta que hierve y se tiene una hora o más; se va sacando una porcioncilla con una cuchara y dejándola enfriar en un plato, para probar la consistencia y el dulzor. Cuando se hace con azúcar espesa antes. Si se considera poco dulce, se echa más azúcar o fructosa y en paz. Si está demasiado fluida, pues se debe concentrar aún más. Una vez alcanzada la consistencia deseada, se mete en tarros de cristal reciclados, de esos que todos tenemos cientos en casa porque nos da pena tirar. Estos tarros se habrán esterilizado previamente en una cazuela con agua hirviendo, durante una media hora, bien cubiertos, y se habrán dejado escurrir boca abajo sobre un paño. A lo que iba, se vierte la mermelada con cuidado en los botes hasta arribota (se puede hacer con un cucharón), se aprieta bien la tapa y se dejan enfriar a temperatura ambiente puestos boca abajo. Por cierto, podéis dejar la fruta sin triturar o triturarla. Yo la trituré porque me parecía que los pedazos de albaricoques eran demasiado grandes y reconocibles.

Receta formal de sorbete de albaricoque (adaptada del sitio web Not without salt)

Ojo, para hacer este sorbete hace falta una batidora o robot de cocina potente, capaz de triturar debidamente albaricoques congelados.
  • 6 tazas de albaricoques congelados
  • Sirope de albahaca hecho con:
  • 3 hojas grandes de albahaca
  • 1 taza de azúcar o 1/2 taza de fructosa
  • 1/2 taza de agua
  • Licor de melocotón o albaricoque añadido al sirope hasta completar una taza de líquido
Como la receta es americana, viene en tazas, qué cruz. Las tazas americanas equivalen aproximadamente a 250 ml.

Se pone el agua del sirope con el azúcar o fructosa hasta que rompa el hervor y se disuelva todo. Se apaga el fuego y se añaden de inmediato las hojas de albahaca. Se deja que se enfríe a temperatura ambiente. Se añade el licor hasta completar los 250 ml. Es mejor meterlo en el frigo y dejar que se enfríe bien antes de utilizarlo.

Los albaricoques se habrán partido, deshuesado y congelado previamente. Se ponen en el vaso del robot o batidora junto con el cuarto de litro de sirope con licor frío y se tritura el conjunto hasta que esté bien suave. Se puede servir inmediatamente (queda un sorbete blandito) o meterlo otro buen rato al congelador y volverlo a batir antes de tomarlo.

Receta pelín chapucera de crema de albaricoque o "apricot curd"

¿Sabéis lo que son los "curds"? Son un dulce típico inglés que se asemeja a unas natillas de fruta, pero más sólido. El curd típico se hace de limón, con mantequilla, azúcar a tutiplén y huevos para espesar. Su uso es similar al de una mermelada. Esta es una adaptación de esta receta:
  • 800 g de albaricoques
  • 530 g de azúcar
  • 5 huevos
  • 130 g de mantequilla
Se parten y deshuesan los albaricoques y se ponen en un perolo. Yo lo hago en Thermomix, que hace las veces de baño maría porque te permite regular la temperatura. Se trituran y se cuecen unos cinco minutos, para que se ablanden y se puedan volver a triturar muy fino. Se añade la mantequilla para que se derrita y se pone a 80 ºC en el caso de la Thermomix o al baño maría sobre una cazuela con agua hirviendo. Ojo si lo hacéis al baño maría en el fuego, porque entonces las cantidades son un poco excesivas, yo las reduciría (recordad que yo tenía un cargamento de fruta del cual deshacerme). Se añaden el azúcar y los huevos y se calienta la mezcla removiendo de vez en cuando o en la Thermomix a velocidad 1 1/2. Tarda unos 20-25 minutos en espesar, aunque es mejor ir probando porque también dependerá del calibre de los huevos. Cuidado si lo hacéis al baño maría para no calentarlo demasiado, pues se puede cortar. Una vez cuajada la crema se llenan los tarros previamente esterilizados hasta bien arriba. Esto es importante porque al enfriarse la crema se reduce. Se corta un redondel de papel sulfurizado del tamaño de la boca de cada tarro y se pone sobre la superficie de la crema, porque al tener huevo se forma una película igual que en las natillas. Se tapan bien y se dejan enfriar a temperatura ambiente. El "curd" británico dura unos tres meses refrigerado y unas seis semanas sin refrigerar. Pero cuando lo probéis, no sé si llegará a tanto... A mí me quedó un poco líquido el mejunje, como se ve en la foto, pero no sé si es que tenía que haber subido la temperatura; no me atreví. Dos días después usé este curd como relleno de una tarta, añadiéndole gelatina para que quedase más sólido... el resultado fue estupendo, con merengue por encima. Desafortunadamente no tengo fotos de esta tarta porque la hice para una cena y desapareció ipso facto. Otra vez será.

Y esta es la historia de 10 kilos de albaricoques... hay que aprovecharlo tó, ¡más cuando es regalao! ¡Hacia el triunfo por el aprovechamiento!

8 comentarios:

  1. Me quedo con el sorbete! jo, que envidia, a mi me encantan, pero no puedo comerlos por la dichosa piel de marras ais...y los melocotones aún me los pelan, pero los albaricoques, como que me van a decir que no :-(
    besotes

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  2. Fantástico uso que le has dado!, me quedo tambien con el sorbet, se ve delicius!!
    Beostes.

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  3. Sra. Mònica: vaya, alérgica... maremía, cada vez somos más. Yo por el momento no tengo ninguna alergia alimentaria.

    Sra. Kako: sí, el sorbete está rico, aún me queda... huy, creo que me apetece una porción... :-)

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  4. I love your blog. The pictures are amazing and so is the food.

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  5. Hola Miriam! Pues yo me quedo con la mermelada, y de receta chapucera nada de nada, bien rica y como se cocina cuando ya se sabe, ¡a ojo!
    Lo de congelarlos es una idea estupenda, para una futura salsita.. mmm!
    Una suerte lo de que te regalen fruta o verdura ecológica, yo me acabo de traer unos tomates de Badajoz... Buah!
    B*

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  6. Sra. Epa: es lo que tiene cuando se tiene soltura, que el método científico se va a la porra. Mmmm, tomates de Badajoz! Eso tiene que ser pura vitamina reconcentrada... qué suerte!

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  7. Pues ésta es la última vez que lo haces con mis albaricoques. Acabamos de asesinar al arbolito. Era un guarro.
    Por cierto, felicidades por las felicitaciones.
    Besos
    Tu hermana.

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