Bizcocho salado de harina de garbanzo y chorizo

Pero qué vicio le estoy cogiendo al blog este... otra adicción, será por adicciones, ay diossss.


El caso es que a cuento de la merendola del sábado pasado, hice dos bizcochos salados, algo muy corriente en ciertas zonas de Francia. Aquí la gente siempre flipa cuando hago alguno, porque no es un plato nada conocido en España. Las recetas vienen de un libro francés de "cakes", como los llaman allí en un calco del inglés, este. Huelga decir que está en francés, no sé si existe algún libro de este tipo de bizcochos traducido. Uno de ellos es de harina de... ¡garbanzo! Sí, me llamó mucho la atención cuando leí el libro. Es que yo, antes de dormir, leo libros de cocina en lugar de best-sellers, es una perversión que tengo. Otra.

Estos bizcochos saladetes se pueden comer fríos, ligeramente recalentados en el horno o incluso tostados en rebanaditas. En las "boulangeries" gabachas te los venden en porciones... ñam.

A lo que iba, escogí el bizcocho de harina de garbanzo y chorizo picante (sic), y otro de queso, avellanas y aceitunas verdes. La harina de garbanzo es bastante más corriente en Andalucía, por ejemplo, que en la altiplanicie donde vivo. Allí la usan, entre otras muchas cosas, en rebozados de pescado y marisco, y en las increíbles tortitas de camarones. Aquí la encuentro en Hipercor y el último saquito que tengo lo encargué en el mismo sitio al que pido a veces harina para pan, el Rincón del Segura. Y encima me ha salido otra receta sin gluten, cáspita. Ahí va la recetilla del primer bizcocho:

Bizcocho salado de harina de garbanzo y chorizo

• 200 g de harina de garbanzo (ecológica del Rincón del Segura :-))
• 4 huevos (ecológicos también, hombreyá)
• 10 cl de aceite de oliva (ecológico de la cooperativa Almagral de Cabeza del Buey, Badajoz)
• 10 cl de leche (corriente y moliente...)
• 1 sobre de levadura (Royal, pues... eso)
• 100 g de chorizo picante (marca blanca, puf como decae esto)
• Sal (yo eché un par de pellizcos generosos)
• Hierbas de Provenza (se me olvidó echarlas, el Alzheimer)

Se pone el horno a calentar a 180 ºC (a 170 ºC si es de convección). Se mezclan los huevos, el aceite y la leche y se les añade la harina tamizada con la levadura. Se mueve todo bien y se añade la sal al gusto y las hierbas. Por último se añade el chorizo cortado en daditos.

Se vierte toda la mezcla en un molde de cake untado de mantequilla y enharinado. Se mete al horno unos 40 minutos (ojo, quizá menos, a mí me quedó un pelín seco). Este bizcocho tiene tendencia a formar una costra enseguida, por lo que se aconseja hacerle unos cortes con un cuchillo para permitir que siga creciendo, transcurridos unos 15 minutos (no temáis, no se baja).

A los 40 minutos se comprueba con un cuchillo o similar si el bizcocho está hecho. Si sale limpio, podemos sacarlo del horno y dejarlo enfriar en el mismo molde.

Aunque la foto que he puesto es cutre de narices, se aprecia que tiene un tono amarillito la mar de primaveral. No se nota un sabor demasiado intenso ni especial debido a la harina de garbanzos, al menos yo no lo noto. De hecho, he encontrado en algún sitio web recetas de bizcochos dulces con harina de garbanzo, como estos brownies. Los tengo que probar algún día.

Si hacéis este bizcocho con antelación es mejor recalentarlo un poquito cuando se vaya a tomar o cortarlo en rebanadas y tostarlas. Así se despiertan sus aromas...